Alquilar su casa puede ser beneficioso para cualquier propietario, ya sea una inversión de alquiler, una residencia principal o una residencia secundaria. De hecho, podrás beneficiarte de ingresos adicionales cada mes y garantizar el mantenimiento de tu propiedad. Pero para hacer esto, primero debes alquilarlo. En este artículo te invitamos a descubrir ¿cómo alquilar tu casa?
Preparar la casa para alquilar
El primer paso en la gestión del alquiler pasa por preparar la casa. De hecho, los propietarios están obligados a proporcionar una vivienda digna a sus inquilinos. Su propiedad debe:
- Incluir una habitación habitable con una superficie mínima de 9 m²
- Tienen una altura de techo de más de 2,20 m.
- Esté seguro (sin riesgos para la salud)
- Muestra un rendimiento energético mínimo.
- Disponer de equipamiento esencial (red eléctrica, cocina, etc.)
Si desea alquilar su casa, debe cumplir con estos criterios. Además, también es muy importante darle un lavado de cara a tu propiedad. Repare artículos dañados, elimine decoración personalizada, etc.
Realizar los diagnósticos técnicos obligatorios.
El diagnóstico inmobiliario es de suma importancia a la hora de alquilar una vivienda. Por un lado, se trata de documentos que confirman la decencia inmobiliaria. Por otro lado, también existen documentos obligatorios para la redacción de un contrato de compraventa. Un expediente de diagnóstico inmobiliario (DDT) reúne varios documentos como el estado de riesgos naturales y tecnológicos, diagnóstico de rendimiento energético, informe de riesgos de exposición al plomo, diagnóstico de electricidad y gas, diagnóstico de amianto, etc.
Para realizar evaluaciones técnicas, es imperativo contar con la asistencia de un especialista capacitado. Esta persona realizará un análisis exhaustivo e imparcial de su residencia. Se recomienda encarecidamente contratar los servicios de un diagnosticador certificado, ya que garantizará su protección en caso de cualquier desacuerdo.
Determinar el monto del alquiler.
Desde el control de alquileres de la ley ALUR, está estrictamente prohibido fijar un alquiler por encima de un límite máximo. El alquiler debe determinarse según las cotizaciones de los agentes inmobiliarios, anuncios similares o el Aviso de alquiler.
Para determinar el valor del alquiler, visite sitios de anuncios clasificados de bienes raíces en Internet y compare tarifas idénticas a su tipo de propiedad y teniendo en cuenta su ubicación geográfica. También debes considerar ciertas reglas específicas aplicables a tu propiedad. Si se trata de una inversión de alquiler debes respetar los límites máximos de alquiler. Estos casos se refieren a viviendas sujetas a un sistema fiscal como la ley Pinel, Scellier o Robien.
Publica tu anuncio
Después de completar los preparativos necesarios para su alojamiento y determinar el precio del alquiler, ha llegado el momento de informar a los posibles inquilinos. Comience por elaborar un anuncio conciso, directo e inequívoco. Incluya información crucial como las dimensiones de la propiedad, la cantidad de habitaciones disponibles, el costo del alquiler (impuestos incluidos) y sus datos de contacto. Asegúrese de proporcionar detalles completos y no pase por alto la importancia de incluir una fotografía atractiva que muestre la belleza de su hogar.
Cuando se trata de distribuir su anuncio, tiene varias opciones. La forma más sencilla sería utilizar opciones en línea como sitios de listados de bienes raíces, sitios de clasificados, redes sociales, etc. Además, también puede publicar anuncios impresos en su casa, en comerciantes, etc.
Concertar visitas
Después de publicar y compartir tu anuncio, ahora necesitas concertar una visita. En primer lugar, es necesario realizar una preselección de candidatos serios y solventes. Entonces planifique sus visitas de forma óptima. Tienes dos opciones: optar por citas individuales o elegir visitas colectivas. Además, las visitas deben realizarse en el momento adecuado. Es decir, cuando su casa de alquiler esté en su mejor momento.
Deberá escuchar y responder honestamente las preguntas de los visitantes. Estas visitas requieren organización y disponibilidad. Si tiene dificultades para comunicarse con posibles inquilinos, es recomendable utilizar los servicios de una agencia inmobiliaria o de nuestros agentes inmobiliarios.
Seleccione el inquilino
La elección del inquilino viene después de las visitas. Elegir el perfil correcto le ahorrará muchas preocupaciones y molestias innecesarias. Encuentre un inquilino que respete su propiedad y la mantenga según sus estándares. Hágase las preguntas correctas antes de elegir. ¿Son responsables y respetuosos? ¿Están acostumbrados a pagar el alquiler a tiempo? ¿Han sido alguna vez objeto de una expulsión o denuncia?
Al alquilar una vivienda, el propietario puede solicitar pruebas de solvencia a los posibles inquilinos. Los documentos acreditativos incluyen documentos de identidad, comprobantes de recursos, documentos que acrediten la condición profesional y comprobantes de domicilio. Estos documentos le ayudarán a elegir el inquilino adecuado.
Alquilar tu vivienda: Protégete de los riesgos del alquiler
Alquilar su casa conlleva muchos riesgos de alquiler, como daños a la propiedad, impago del alquiler, disputas, etc. Por eso necesitas protegerte. Aquí hay 2 soluciones para ayudarlo a mantenerse seguro:
- Solicitar una fianza: La fianza es una garantía que permite al arrendador protegerse contra daños y deudas impagas por parte del inquilino. Se devuelve al finalizar el contrato de alquiler;
- Contratar una garantía de impago de alquiler (GLI): Se trata de un seguro privado que protege al arrendador frente al impago del alquiler, daños al inmueble y posibles costas judiciales.
Por otro lado, existen otras soluciones para garantizar la seguridad del propietario. De hecho, estos últimos pueden solicitar una fianza, solicitar un aval, confiar la gestión de la propiedad a un profesional, etc.
Preparar los documentos necesarios.
Para asegurar una propiedad de alquiler, la etapa final consiste en reunir la documentación necesaria. Comience por considerar el contrato de arrendamiento y los documentos adjuntos. El contrato típico abarca detalles importantes como la identificación de ambas partes involucradas, la dirección de la propiedad, el monto del alquiler, los términos para los ajustes anuales y un inventario completo del mobiliario de la casa. Además, debe incluir un registro de cualquier mantenimiento o renovaciones realizadas desde el contrato de arrendamiento anterior, el valor del alquiler anterior y el valor del alquiler actual en las inmediaciones.
En segundo lugar, el inquilino también debe proporcionar un aviso detallado que cubra los derechos y obligaciones de ambas partes. Estos son los archivos adjuntos.
Por último, el propietario también deberá realizar un inventario en el momento de la entrega de llaves. Este es un documento que certifica el estado de la casa antes de su desarrollo. Este trámite requiere la presencia del inquilino.